Considerado ya un clásico este magnífico exponente del realismo fantástico argentino se nutre del policial, la noticia periodística y los mitos urbanos.
Narrando historias a partir de un personaje, Ricardo, alter ego de Ricardo Barreiro, que decide investigar historias transcurridas en el barrio , el mítico Parque Chas,a partir de extraños sucesos que le ocurren, donde patotas de niños asesinos , túneles diseñados para que Perón escape en una eventual necesidad, ventanas clausuradas que pueden dar a otro mundo , Giácomo Casanova, Dolina, El corto Maltés , El eternauta, Borges… la aventura, configuran un laberinto de situaciones que deben resolverse o al menos contarse.
El señor Vicente Chas loteó unos terrenos, por encargo municipal, lo que luego se llamaría Parque Chas , le encargó dicha tarea a los ingenieros Armando Frehner y Adolfo Guerrico , el proyecto fue realizado en la forma actual de telaraña, lo que le permitió sacar mas lotes que la típica traza urbana cuadricular, se supone inspirado en las principales capitales europeas, quién lo sabe….
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